Santo Domingo Conquistar fama de manera vertiginosa a muy temprana edad, ha sido una bendición para José Daniel Betances, mejor conocido en el mundo artístico como El Nene La Amenazzy. Pero a la vez fue una dura guerra en las que perdió varias batallas para llegar a conquistar la experiencia y los conocimientos necesarios que se requieren en la música.
Comenzó a dar sus primeros pasos en la música a la edad de nueve años, siendo siempre apoyado por su madre en cada una de sus facetas como niño, pues al ser hijo único esta le brindó todo a su paso pero haciéndole saber el valor de los placeres de la vida, puesto que conllevan sacrificios que deben ser apreciados y tratados con respeto.
“Desde pequeño siempre me ha gustado la música pero papi y mi tío querían que fuera pelotero y por gusto a ellos lo hacía, pero mami es que siempre me apoyaba, me dejaba hacer todo lo que quería, me dejaba soñar; a pesar que tuvimos un estilo de vida humilde me hacían sentir como un príncipe, por eso nunca la decepcioné y cuando le dije que quería cantar que dejaría la pelota me apoyó y le puse énfasis para demostrarle el amor y su confianza hacia mí” dijoen una entrevista para LISTÍN DIARIO.
Primera vez en escena Iniciación. Antes de su irrupción en el arte, El Nene asegura que su vocación fue pasional o simple fanatismo de lo que estaba en el momento que hizo nacer su inspiración por la música urbana, dejando salir ese artista que en ese momento no sabía que llevaba dentro.
En ese sentido, recordó con emoción su primera experiencia en un escenario, donde con una mirada firme hacia su destino, mostró una actitud de verano con fe de novato que hicieron desaparecer los nervios de su madre al ver a su pequeño salir triunfante viviendo su sueño anhelado. “A los 9 años tuve mi primera fiesta, abriéndole a Vakeró (…) y al Lápiz. Recuerdo que cuando yo subí a cantar, mami estaba hasta llorando de la emoción” contó.
